¿Por qué las agencias que siempre dicen sí a sus clientes se equivocan?
Cuando las agencias tradicionales siempre dicen "sí" a las demandas de sus clientes, parece que están haciendo lo correcto. Al fin y al cabo, el cliente es el que paga.
Pero.
¿Qué ocurre cuando la agencia se convierte en un "sí automático"?
Las agencias tradicionales, con contratos anuales y planes preempaquetados, suelen caer en la trampa de complacer a sus clientes en todo momento. Esto no es necesariamente malo… hasta que lo es. Porque, seamos sinceros, nadie puede ser experto en todo. En muchos casos, los clientes buscan una agencia porque no tienen todo el conocimiento en casa. Y sin embargo, las agencias tradicionales acaban plegándose a sus deseos, aunque lo que el cliente pide no sea lo que realmente necesita.
Esto no solo mina el impacto de las estrategias, sino que puede llevar a resultados mediocres (o francamente malos). Peor aún: muchas veces, cuando las cosas salen mal, la agencia y el cliente se miran con cara de "¿y ahora qué?", y la relación se desgasta.
El problema del clientecentrismo mal entendido.
El cliente debe estar en el centro, sí. Pero una cosa es ser flexible y otra es perder el rumbo. Las agencias tradicionales suelen caer en el clientecentrismo mal entendido, donde el "sí" a cada solicitud termina siendo más importante que los resultados reales.
Ejemplo típico: una empresa quiere aumentar su presencia online y pide una campaña de redes sociales súper creativa. La agencia, queriendo agradar, dice que sí sin cuestionar. Pero luego resulta que el problema no era la creatividad, sino que los leads que llegan no son cualificados.
Aquí es donde una agencia realmente estratégica hubiera dicho: "Espera, vamos a analizar antes de ponernos creativos. Tal vez necesitamos mejorar tu segmentación, tu funnel de ventas o incluso tu propuesta de valor."
Decir "sí" de entrada lleva a ejecutar tácticas sin una visión estratégica clara. Y eso no sirve ni a la agencia ni al cliente.
¿Por qué ocurre esto?
1. Inercia del modelo tradicional.
Las agencias que trabajan con contratos anuales suelen operar con una mentalidad de "mantener al cliente contento". Y claro, es más fácil decir que sí a todo que tener conversaciones incómodas.
2. Falta de especialización.
Muchas agencias ofrecen de todo un poco, pero cuando toca profundizar, no tienen el conocimiento ni las herramientas necesarias para desafiar las ideas del cliente.
3. Miedo a perder clientes.
Existe un miedo latente: "Si no hacemos lo que pide, buscará otra agencia." Pero en realidad, las empresas buscan socios que desafíen su pensamiento, no simples ejecutores.
¿Cómo lo hacemos diferente?
En I lead you, hemos optado por un enfoque completamente distinto. Creamos proyectos ad hoc, diseñados a medida para las necesidades reales de nuestros clientes, en lugar de servicios enlatados.
Cuando trabajamos con una empresa, empezamos con un diagnóstico claro:
¿Qué estás intentando conseguir?
¿Qué obstáculos tienes ahora?
¿Qué métricas realmente importan?
Y si lo que el cliente quiere hacer no tiene sentido, se lo decimos. Con datos, con argumentos, pero sobre todo con transparencia. Porque al final, una agencia no está para seguir órdenes, sino para aportar soluciones estratégicas que lleven a resultados concretos.
El poder del "no" bien argumentado.
Decir "no" no significa ser conflictivo, significa ser un verdadero socio.
"No necesitas otra campaña de emails masivos; necesitas segmentar mejor."
"No inviertas más en SEO hasta que tu web convierta mejor."
"No hagamos esto ahora; enfoquémonos en una solución que realmente impacte tus resultados."
Esas son las conversaciones que generan confianza a largo plazo y resultados tangibles.
¿Qué tipo de agencia necesita tu empresa B2B?
En un mundo donde la velocidad del cambio es brutal, las agencias tradicionales con modelos rígidos y estandarizados están quedándose atrás. Las empresas B2B españolas necesitan socios que no solo ejecuten, sino que piensen, desafíen y propongan. Porque, seamos claros: un proyecto bien enfocado vale más que 12 meses de checklists que no llevan a ningún sitio.
Así que, si estás buscando una agencia que no tenga miedo de decirte lo que necesitas escuchar (aunque no sea lo que quieres oír), tal vez deberíamos hablar. Porque la clave del éxito no está en decir "sí", sino en construir algo que realmente funcione.